Subo al tren descarrilado camino a la chingada. Traigo la sangre caliente.

Thursday, September 29, 2005

Tácticas de guerra

No le llamaré. Eso me recomendaron y lo voy a acatar. Sé que tampoco me llamará a mi. Y si es así, entonces que esto ya muera por la paz y mi salud emocional. Estoy pensando si comprarle un DVD de A STREETCAR NAMED DESIRE cuando vaya a Los Angeles. Si se dedica a la actuación, entonces tiene que ver lo hace todo el elenco de esa película en nombre de la gloria artística. Es un clásico que estoy seguro que no conoce. Todos los críticos de Estados Unidos la han mencionado como un parteaguas en el estilo de actuación que marcaría a las generaciones posteriores (desde Robert DeNiro y Al Pacino hasta Edward Norton y Sean Penn). Dios me acompañe en este viaje. Que todo salga bien y regrese con dinero, salud y paz.

Pero no te extraño

Sólo me hago pendejo.

Wednesday, September 28, 2005

Más que tu amigo

Anoche volvió. No sé por qué lo hace. Se disculpó por no haber contestado el mensaje que le envié por celular el domingo. Dijo que tenía mucho trabajo con la obra y por eso no podía estar al pendiente del teléfono. Pero estoy seguro que su trabajo no duró toooodo el domingo y ¿acaso no me pudo enviar un mensaje ayer lunes? ¿Por qué insiste en adoptar actitudes tan negativas, tan resbalosas, hacia mi si yo puedo ver que en el fondo no es así? Mi lucha entonces será sacar lo bueno que tiene dentro y ponerlo sobre la mesa. Hacer que se enfrente a lo que está pasando, porque estoy seguro que no ignora la atracción que por lo menos ha surgido en mi y de la cual se está aprovechando (o parece estarlo). Habrá que despejar la nube de conveniencia que se ha empeñado en crear a su alrededor.

Me echó dos o tres flores y luego me dijo que había que ir a cenar al Thai Gardens en Polanco a mi regreso de Los Angeles. "Llámame", dijo. Yo le respondí: "O también tú puedes llamarme." Se detuvo unos instantes y me miró con sorpresa. Como si no esperara que me fuera a atrever a contestarle eso. Pues ahí lo tienes, no siempre seré el corderito noble rumbo al matadero. Aunque me muera por ti, también tengo que conservar algo de dignidad. También debo ver por mi, cerciorarme de alguna manera que te gusto más que como un contacto profesional. Más que un amigo. Más, mucho más.

Tuesday, September 27, 2005

Amanecer

Anoche por fin pude dormir bien. Después de haber platicado con mi productora, me sentí mucho mejor. No quería contárselo pero si no se lo decía a alguien, iba a estallar o cometer algún error del cual me arrepentiría después. Y ella me dio consejos tan buenos que me calmaron de inmediato y me hicieron ver la realidad de la situación con JdDO. Lo que debo hacer es alejarme de su lado. Eso voy a hacer. Obligarme a que no persiga mis pensamientos pues acabará por hundirme y ya comprobé que JdDO no tiene el mismo tipo de sentimientos hacia mi. Ahora debo levantarme y amanecer de nuevo.

Monday, September 26, 2005

Respiro por la herida

Me arriesgué y perdí. Yo sabía que esto podía pasar. Pero no que iba a doler tanto. De verdad no pensé que sería imposible arrancarme a JdDO de cada poro de mi cuerpo. Llevo una semana que no puedo conciliar el sueño por las noches pues mi cabeza vive abrumada de tanto recordar los momentos juntos, los que podrían suceder y los que aún deseo que se susciten. Siento que se me ha escurrido entre las manos y no sé por qué. Bueno, sé que no le gusto, ahora ya me queda claro. Pero, ¿por qué me dio alas? JdDO me ha coqueteado en varias ocasiones y me rehúso a pensar que lo hizo por conveniencia profesional… su bondad no se lo permitiría y yo jamás me hubiera enamorado de alguien que no es así. Quizás deba comenzar el proceso de aceptación de que así es la gente que se dedica a la actuación, que no lo hacen por maldad sino porque tienen que ver por sí mismos con sus propios atributos de carisma y seducción. Nimodo. Es una buena persona y debo comprender que yo me fui por un camino que nunca debí haber considerado. Acéptalo: nunca se enamorará de ti. No hay posibilidades para ti en su vida. Haz como puedas para echar todos estos sentimientos al olvido. JdDO seguirá ahí, por el mundo, y tú no tendrás cabida en su corazón. Este capítulo queda cerrado.

Soy el águila errante

Los hechos: nos citamos a las 9:30pm en el Ligaya, un restaurante padrísimo de la Condesa. Yo iba hecho un príncipe, me puse mi mejor traje (un Hugo Boss que tenía guardado para una ocasión especial), me restregué la cara la noche anterior para cerrar poros y todo eso, en fin, me pulí. No es por echarme porras, pero me veía bastante bien (hasta me lo hicieron notar en el trabajo). Estaba nervioso, contento… ¡por fin se me iba a hacer tener un momento a solas con JdDO! Suena terriblemente cursi, pero ¡era la primer cita romántica de mi vida!

Llegué puntualísimo y eso me dio tiempo para escoger una mesa para dos hacia el fondo, algo muy íntimo que permitiría lo que yo esperaba fueran actitudes de igual naturaleza. A las 10pm, ya iba en mi segunda copa de vino blanco y nada de JdDO. Me empecé a preocupar. Llamé a su celular y me dijo que iba en camino, pero que venía acompañado de SU HERMANO. Tragedia. Mi corazón se fue hasta el suelo y comprendí que la razón por la cual venía con acompañante era porque no quería nada conmigo. Rápidamente indiqué a la mesera que me cambiara a una mesa para tres (imagínate la vergüenza si no le hubiera llamado y me hubieran encontrado en mi mesita íntima para dos), pedí otra copa de vino y encendí el tercer cigarro de una cajetilla que terminaría vacía al final de la noche.

Dieron las 10:15pm y yo ya estaba hablando solo, mentándome la madre a mi mismo y a JdDO, recordando canciones que iban muy de acuerdo con las características depresivas de la noche (“Looking for Love in all the Wrong Places” y “Soy el águila errante, que se cruzó en tu vuelo… qué bonita pareja haríamos tú yo, traicionero el destino fue el que dijo que no”). A causa de esto último, no en balde varios comensales a mi alrededor me echaron miradas de extrañeza (“que pedo con este cabrón que habla solo”, seguro pensaron).

A las 10:30pm llegaron los hermanitos. No es el que hermano no me haya caído bien, ¡pero esa debió haber sido una noche entre JdDO y yo! En mi depresión, puse mi mejor cara e hice como si no pasara nada. Luego, JdDO tomó el micrófono de la conversación durante toda la noche para dedicarse a relatar sus triunfos pasados en el modelaje y la actuación y cómo la gente le tenía afecto en la vida y demás. Ahí mismo me di cuenta que esta cena la estaba tomando como un evento de relaciones públicas. De manera implícita, se estaba promoviendo para que yo le impulsara su carrera en la compañía… al menos eso fue lo que yo entendí por su actitud. Nunca conoceré la verdad pero sí siento que, de no haber estado el hermano, otro gallo hubiera cantado (y creo que no habrá otra cena entre nosotros dos, así que el misterio me durará toda la vida). Platicó insistentemente de un actor/modelo que es su amigo, lo cual me llevó a creer que entre ellos podría haber una relación que va más allá de la amistad (o que, por lo menos, le gusta a JdDO).

Y no es que me haya caído mal, es más, me sigue encantando. Sigo enamorado, qué puedo decir. Su personalidad durante la cena fue la misma que me conquistó… noble, agradable, decente. Su belleza a flor de piel. Estuve y estoy en sus manos. Total, al final de la noche, cuando estábamos esperando su carro y el hermano se había alejado por unos momentos, sucedió algo que me dolió. Comenzamos a platicar de aquella noche hace tres semanas cuando fuimos a una fiesta de la compañía y luego al departamento de un amigo donde traté de darle un beso en la boca. Yo me disculpé profundamente y en eso, me abraza y me dice “no importa, no importa”. Luego me vuelve a abrazar… un abrazo que era más que de amigos. Si no quiere nada conmigo, ¿por qué me hace pensar lo contrario? ¿Por qué prende el agua y no se mete a bañar? ¿Me quiere tener picado por una conveniencia profesional?

Después me invitó a la fiesta de una amiga suya (también actriz) en un bar de Polanco y yo, borracho, acepté (JdDO no había tomado porque tiene alergia al alcohol). En la fiesta me volvió a abrazar y hasta me mencionó que la siguiente vez que nos viéramos, me llevaría a un bar que seguramente me gustará. Me tenía todo aturdido, obviamente. Aprovechaba cada momento para platicarle, estar a su lado. Después, junto con su hermano, me dio un aventón a mi casa (que le quedaba lejísimos de la suya, o sea que fue un gesto amable de su parte) y en el camino creo que me evidencié de más porque, aunque no dije abiertamente que me gustaba, hablé de cosas personales mías (“nunca me he enamorado”, etc) que, en retrospectiva, suenan patéticas y seguramente le disgustaron.

Al cerrar la puerta de mi casa, me deslicé contra ella y lloré por dos horas seguidas. Fue como apagar la lumbre con gasolina. Todavía el dolor me acecha, no lo puedo evitar. Nunca antes había llorado por alguien. El domingo le envié un mensaje a su celular: “Hola J, Gracias por el viernes, me la pasé excelente. Si puedes entre semana avísame y lo repetimos. Mucha suerte con tu obra hoy en la Condesa. Un abrazo”.

No me ha respondido hasta ahora. Creo que ya no lo hará. Fui a misa y hasta le pedí a Dios que me diera chance. That’s a lot for me, man. Quizás le marque a mi regreso de Los Angeles la siguiente semana pero sinceramente creo que debo dejar que esto muera. JdDO no me quiere como novio, no le intereso, me queda claro... ya le he tirado tanto el anzuelo que debe saber dentro de sí que me tiene en un estado de fascinación extrema. Estoy enamorado, punto. Y de verdad. No es sexual, va más allá. ¿Nimodo?

Just my luck that when I finally fall in love, it's with someone who won't love me back.

Friday, September 23, 2005

Siempre me traiciona la razón

Acabamos de hablar por teléfono. Nos veremos hoy en la noche. Ya pedí una mesa que nos permitiera estar sentados lado a lado, en vez de frente a frente. Mi estómago no cesa de desacomodarse y siento un fuego profundo por todo el esternón, ¡¿cuánto más para que lleguen las 9:30 de la noche?! Ya hasta tuve que ir al baño dos veces de la tensión. Creo que lo mejor será pensar en que me la voy a pasar bien, que será un viernes como cualquier otro y que nos divertiremos. Estando ahí decidiré si le suelto la sopa o no. A fuerzas, ni los zapatos. Ojalá JdDO se adelante y me diga lo mismo que estoy pensando... pero la veo difícil. Es muy posible que haya aceptado venir conmigo porque quiere que yo aporte a su posicionamiento en la empresa. Esto quiere decir que me estaría utilizando de alguna manera. La otra opción es que yo sí le guste por quien soy (muy aparte de mi puesto), que sus sentimientos sean genuinos. Ojalá sea así. Aunque al final llegue a confesarme que no me quiere de novio, espero que no esté aceptando frecuentarme sólo por interés. Al menos por amistad, que con gusto aceptaría.

De pronto me desconcierta oírme hablar de esta manera porque esta es una situación que jamás había considerado antes. Por la religión, mis principios, mi propia personalidad hermética, miedo. Hace diez (o cinco) años ni siquiera le hubiera dado más de dos minutos de pensamiento. Ahora me ha nacido una sed feroz por enamorarme, una necesidad. Quiero entregarme, más que en cuerpo, en alma. Que me domine el corazón.

Wednesday, September 21, 2005

Es un sorbo de coñac

Anoche estuvo aquí. Asomó su cara a mi oficina, sonrió y yo casi me zurro. Nos abrazamos y luego platicamos. Yo estaba hecho un desmadre... tuve que hacer un esfuerzo claro y consciente para no temblar y obviamente para no caer al piso de un ataque cardíaco. JdDO, en cambio, con una frescura absoluta. Sin problema alguno. Creo que ya se dio cuenta que me tiene en sus manos (¡qué bueno! para que luego salga con que se sorprendió) pero no me siento en peligro (bueno, falta que luego acabe con el hocico ensangrentado). Quedamos en cenar este viernes. Propondré un restaurante de la Condesa. Algún lugar con mesas pequeñas que permitan la plática de murmullo, al oído. ¡Tengo que hacer mi lucha! Este asunto me ha tenido desbaratado por casi tres semanas y quiero ponerle un fin, para bien o para mal. He resuelto conmigo mismo que este es un gran riesgo... pero estoy dispuesto a tomarlo porque alguna vez tengo que hacerlo en esta vida. No importa si me batean o no, al menos yo lo intenté y por mi no quedó. Tengo que darle en la madre al hielo que traigo dentro y sentirme liberado emocionalmente.

"¿Puedo confiar en ti? No tengo la menor idea de cómo vayas a reaccionar pero espero que no lo tomes a mal... nunca se lo he dicho a nadie antes y ahora me quiero arriesgar... me gustas mucho."

Ojalá me responda lo mismo y si no, solamente pediré su silencio al respecto. A fin de cuentas, soy un hombre discreto.

Monday, September 19, 2005

Fever

Fin de semana largo, sin novedades. Dentro de poco, un recuento de mis emociones y acontecimientos.

Wednesday, September 14, 2005

Et j'ai crié

Ya acabé de leer EL AMANTE de Marguerite Duras. Creo que el amante soy yo. Ese personaje chino que se deshace a causa de su deseo por la joven blanca. Me veo reflejado en algunas de sus características pero todavía no llego a tocar el mismo fondo que ese hombre. Y realmente no quiero que así sea. Quiero ser feliz, al menos conocer la reciprocidad en el amor una sola vez. Eso es lo que busco.

Por cierto, tengo la ligera sospecha que orillé a cierta persona a que tomara los votos religiosos. Hace 8 años viví una experiencia horrorosa a su lado (mi primera relación sexual) y sufrí el desdeño de su parte. Nos reencontramos a principios de este año y me insistió que iniciáramos una relación formal. Resultó que ahora sí se había enamorado de mi. Hace mucho que yo le había dejado de guardar rencor pero despúes de tanto tiempo, jamás hubiera podido animarme que estableciéramos algo, lo que fuera. Me era imposible, me lo debía a mi mismo y a todo lo que sufrí y juré ocho años antes. Y se lo dije. A los pocos meses me enteré que tomó los votos. Recordé que cuando nos reecontramos, ya me había comentado que necesitaba enamorarse, que ya se había hartado de acumular amantes y que había venido a la Ciudad de México precisamente a encontrar el amor. Quizás yo fui su último intento. Supongo que entendió que cualquier intento sería en vano, que conmigo estaba cosechando la podredumbre que había sembrado ocho años antes y que ya no había remedio. No le voy a dar tanta importancia a la intervención que tuvo en mi vida, pero en cierta medida, soy un ser quebrado por su culpa y es obvio que de no habernos encontrado en la vida, yo sería otro. No dejo de responsabilizarme de de las decisiones que yo mismo tomé, pero quién sabe... el destino pudo haberme juntado con otra persona, igual o peor (¿o mejor?). Por lo pronto, ojalá sea muy feliz en lo que haga. No le guardo un solo sentimiento negativo.

Por lo pronto yo sólo pienso en JdDO. Cuando nos vimos el domingo pasado al terminar su obra de teatro, me abrazó sin que yo se lo pidiera. Ya nos habíamos dado un abrazo de saludo pero al final me dijo: "Otra vez". Y volvió a abrigar mi espalda con sus brazos. Sentí su sonrisa recostarse sobre mi hombro. Desde entonces amanezco a diario con esa sensación.

Tuesday, September 13, 2005

Callé tu boca

Hoy desperté pensando en JdDO. No deseo cansar a nadie con este tema pero por ahora es lo que me tiene consumido (bueno, eso y la telenovela que estoy escribiendo... ¡está quedando padrísima!). El plan de ataque es el siguiente: el jueves en la tarde le llamaré: "Hola, ¿cómo estás?" (muy normal, como si no pasara nada... bueno, con el ya consabido tono de interés y chispa que sólo puede emerger de un hombre enamorado). "Te hablo para vernos el fin de semana. Vamos mañana a comer o cenar, lo que sea. Me encantaría verte".... la verdad se que soy terrible para esto, es que no estoy acostumbrado a hablarle bonito al oído de quien me gusta. Me siento inadecuado, incómodo, tonto. ¿Me entienden? Y no me quiero sentir así porque lo proyectaré y JdDO se percatará de esto y entonces sabrá que tiene control sobre mi. Ése es el chiste: tener control sobre mi mismo para hacerle ver lo que me causa pero sin que sienta que estoy a su merced. (aunque sí lo estoy... desde que nos conocimos, solté todos los estribos que alguna tuve en mis manos). Veo tan posible el momento en que nos besemos, pero lo que más me entusiasma son precisamente los instantes anteriores a ése, cuando por medio de las palabras, la coquetería, las miradas y el acercamiento corporal se produzcan chispazos y me ahogue en violentos ataques de taquicardia (como espero que también suceda en JdDO).

El caballo se ha desbocado.

Monday, September 12, 2005

El primer tonto de tu vida quiero ser

Fui a la obra. Vi a JdDO. Su aspecto era un tanto desgarbado pero debo confesar que me sigue encantando. Intercambiamos teléfonos, tuvimos un encuentro agradable que me dejó con ilusión. Creo que le llamaré el jueves para que nos veamos el fin de semana, aprovechando el puente. Por ahora me mantengo en una nube de indecisión, alboroto, sentimientos encontrados y fascinación. No estoy seguro de su respuesta pero quizás sea positiva. Siento que algo puede pasar. Sería la primera vez en mi vida.

Thursday, September 08, 2005

Ortiz V

No quiero preocupar a mis amables lectores o a aquellas personas que en un algún futuro leerán mis entradas... pero la verdad es que ¡ya no puedo más!

JdDO es una bomba de tiempo... va a estallar, lo sé. Mis dos compañeros de trabajo ya se las huelen y bien fuerte. La mesa se encuentra servida para que, en el momento menos pensado, vomite el mal de amores por el que atravieso.

Todo es cuestión que me fusile una borrachera de truenos y relámpagos para que suelte toda la sopa a quien esté a mi lado (de lo cual me arrepentiré después, como siempre). Necesito confesarlo a alguien... ¡el blog ya no es suficiente! Mis requerimientos terapéuticos ya llegaron al nivel de que alguien me aconseje, empuje, escuche, informe y ayude con JdDO.

YA. Estoy harto de sentir que me hace falta algo. El domingo iré a ver su obra y pondré todo de mi parte para que exista un resultado positivo entre los dos. Si no es así, entonces ya podré dar por terminada esta pequeña etapa de mi vida.

Me aterra pensar que me pueda aceptar porque es una posibilidad demasiado bella, lo que más deseo.

JdDO me ha provocado lo que nadie antes.

¿Dónde estás, JdDO?

Ortiz IV.

JdDO no fue a la fiesta de anoche. Su amigo me dijo que tenía un resfriado. La fiesta, muy bien. Pero me dolió no encontrarme con JdDO. Actúa en una obra teatral así que estoy pensando en ir este mismo domingo. Espero que con esto no me vaya a evidenciar de más pero es que ya son tantas las ganas de que nos veamos. Por cierto, su amigo me dijo que en realidad JdDO no se molestó por lo del viernes pasado. Sinceramente, creo que toda esta situación no prosperará pero es imposible que deje de pensar en ello. Quizás haya una esperanza... tan sólo una, es todo lo que necesito. Una pequeñita. La ansiedad me carcome.

Wednesday, September 07, 2005

Ortiz III.

Ahhhhh... no puedo dejar de pensar en JdDO. Creo que estará presente en la fiesta mexicana que habrá hoy en la noche. Irán todos con los que trabaja así que es muy probable que también esté ahí. Mi día, hasta ahora, no ha sido más que un conjunto de pequeños ataques nerviosos. Control, control. Nada pasará. Lo peor que podría suceder es que sea cortante, se dé la media vuelta y me deje hablando como el estúpido que hasta ahora he sido. ¿Por qué insisto en meterme en este tipo de problemas? Y pensar que, si no me hubiera emborrachado, el estado de nuestra relación sería diferente. Pinche alcohol. Juro que hoy en la noche me comportaré como un hombre decente y beberé sólo agua de horchata o coca cola. ¡Basta de desfiguros alcohólicos! JdDO, no me falles. Tan sólo permite que me quede con un poco de dignidad.

Tuesday, September 06, 2005

Ortiz II

Qué desgracia es el deseo mal correspondido. O el que no es correspondido en lo absoluto. Ahora lo estoy viviendo. Un amigo de JdDO me platicó que al parecer siente molestia por lo que pasó el viernes. JdDO seguramente odió que yo hubiese creado una situación comprometedora a su alrededor. Fue todo lo que le dijo pero bastó para que yo entendiera que nuestro siguiente encuentro será incómodo, terminante. Soy un estúpido, la verdad. Mañana habrá otra fiesta a la cual posiblemente acuda JdDO. Si nos vemos, creo que seré directo: "es una pena lo que pasó el viernes pasado... olvidemos que ocurrió... espero no te hayas preocupado... ¿disculpa?". Lo que en verdad quisiera decir es : "¡Empecemos de nuevo! Me gustas más allá de mis fuerzas. Quiero vivir algo extraordinario a tu lado. Vamos a intentarlo. Borremos la idea de quiénes somos, a qué nos dedicamos... hagamos como si fuéramos dos extraños perdidos en el campo, solos, sin el mundo que nos mira y nos juzga y nos dicta cómo debemos actuar. Como Meryl Streep y Clint Eastwood en Los Puentes de Madison. Sentir la pasión que nos lleva, sabiendo que no hay otra persona con quien debemos estar en ese momento. Vernos sin las máscaras del día a día, sin todos los tapujos. Seamos felices. Yo sé que tú también lo quieres. Estoy aquí, tómame y deja que yo te tome a ti."

Quizás la tormenta interior que estoy viviendo sea una retribución por los rechazos que he tenido hacia otras personas a lo largo de mi vida. Quizás. Mientras tanto, yo me quedo ahogado en mi deseo, consciente que JdDO anda por el mundo, lejos de mi.

Monday, September 05, 2005

Ortiz.

Ahora sí estoy al borde de la deriva. Volví a encontrarme con JdDO y me deslumbró. Con todo respeto para los habitantes de Nueva Orleans, fue como si "Katrina" hubiese llegado a romperme en dos. Nunca pensé que su nobleza, carisma, bondad y belleza me devastarían de tal forma. Ya me había gustado desde la primera vez que nos encontramos pero ahora, después de nuestro encuentro del viernes... está aquí, ardiendo cada uno de mis pensamientos. Es atosigante sentir que cada rincón de mi cuerpo es una celda en la cual habita. Yo no soy enamoradizo... es más, a mis treinta años (recién cumplidos), ¡jamás me he enamorado! Pero siento que esto es distinto. El arrastre que me provoca va más allá del sexo. Más que nada, se trata de su nobleza. Ese aire de amabilidad que yo también veo en mi mismo. Porque soy bueno (¡lo soy!) y quisiera estar con una persona de esa misma naturaleza para crear un bien entre los dos. Es algo raro pues el tipo de relación que tendríamos siempre ha ido en contra de mis valores y principios... es el innegable grano de sal que he ignorado durante toda mi vida pero que sigue ahí, clamando atención. Y cuando se aparece un detonador como JdDO, las aguas se pican y las arenas se alzan. No es algo de lo que me sienta orgulloso al caer la noche pero a veces se me escapa de las manos.

¿Y JdDO? Tiene una cara que abraza, su risa sin pretensiones, ojos de un azul transparente (como su personalidad), aquel momento cuando platicamos en la fiesta del viernes que dejaba acercarse de más a mi oído para hacer entendible su plática, la manera en que mi boca casi rozó su mejilla cuando yo me incliné a platicarle, la aproximanción de nuestros hombros, su delicadeza al tratarme... estaba casi seguro que nos habíamos flechado pero la noche tuvo que terminar mal (fue mi culpa). No sé si ahora quiera hablarme. Y hay más impedimentos. No estoy tan seguro de que yo le guste. No soy feo pero JdDO se dedicó al modelaje hace unos años así que seguramente habrá recibido mejores propuestas que la mía de hombres de buena talla (económica, físicamente) . En este negocio, eso siempre acaba ganando, ¿no? Haz algo por mi y yo haré algo por ti. Serpientes y escaleras. Pero yo me rehúso a ser la escalera de nadie (lo que pasa es que tengo una posición superior, pero de índole diferente, a la suya en la empresa en que trabajamos). Lo único que puedo ofrecer es mi corazón y aunque me parece que JdDO podría ser una persona interesada en el corazón, creo que ya hubiera demostrado más interés en mi a estas alturas... y más aún si no hubiera existido ese mal final de viernes que me empeñé en crear. ¡Fue algo espantoso!

Ahora me deshago al pensar en todo su ser... ¿cuánto más durará esta urgencia? El deseo me consume. Lo peor de todo es saber que nuestras almas podrían disfrutarse tanto, que somos compatibles, que me encanta, que podría enamorarme como nunca lo he hecho... que ya soy suyo. ¿Debo pedir por un milagro o olvidar todo esto de una buena vez? ¿Te volveré a ver?

¿Qué pasará?