Que no puedes engañarme
Fin de semana de mucha ebriedad. Tanto que casi se me salen las lágrimas platicando con JdDO en una fiesta (lágrimas de dolor, obviamente). Me da risa que todo mundo piense que le gusto, cuando en realidad no es así. Le aclaré muchas cosas y a mí se me esclarecieron muchas más. Lo que me pareció muy obvio es que me quiere engañar haciéndome pensar que nunca se dio cuenta que a mi me gustaba. Tiene una pinta de inocente que no le queda porque, en el fondo, ésa es la misma actitud que yo tuve por años (y que a lo mejor aún practico en ciertas ocasiones) para depistar a todos y desentenderme de ellos. JdDO y yo nos aprovechamos de nuestra cara de bondad para intentar venderle a la gente un mensaje de pureza que nadie acaba creyéndose. En realidad sabemos muy bien el juego que estamos jugando y tenemos más experiencia que la que aparentamos. La relación entre nosotros se debería llamar "Te pareces tanto a mi".
Somos dos partes de la misma persona, pero con la ligera diferencia que JdDO está pasando por pedos que yo ya superé o que por lo menos ya no me pesan tanto. He comprendido que llegué 4 años antes a su vida (tiene 26 años y yo 30). Estoy seguro que en un futuro se va a hartar de sus rollos, de su explicación de "no quiero enamorarme porque necesito hacer una carrera", de "no puedo salir contigo porque he descubierto que no está en mi naturaleza", etc. Bla, bla, bla. Ni modo... llegué muy temprano. Tiene que superar sus problemas... es obvio que vivió una crisis fuertísima de la que no ha salido. Tiene miedo y unos pedos enormes como yo los tuve a su edad, pero los tiene que resolver por su cuenta, porque así me pasó a mí y nadie me pudo ayudar porque yo mismo me negué.
Qué lástima... tengo la impresión de que probablemente, bajo otras circunstancias, pudimos haber sido muy felices.
0 Comments:
Post a Comment
<< Home